La celebración gira alrededor de Sant Jordi, un caballero que salvó a una bella dama de un dragón. Sant Jordi mató al dragón y de su sangre brotó un precioso rosal. De él cortó una rosa roja y se la dio a la princesa, estableciendo la tradición de los hombres de regalar una rosa a su amada. Hacia finales de la década de los 1920, siguiendo la tradición que estableció Vicente Clavel (un escritor y librero valeciano) para promover la venta de libros estableciendo un Día del Libro, los editores y libreros de Barcelona decidieron mover la fecha al 23 de abril, que coincidía además con las muertes de Cervantes y Shakespeare. Desde entonces, San Jordi ha pasado a ser para Catalunya su propia versión del Día de los Enamorados, combinando amor y cultura.
Aunque normalmente coincide con un día laborable, la festividad está declarada como Fiesta Nacional en Catalunya, con muchas banderas catalanas (senyeres) engalanando los balcones, un reflejo de la forma de ser catalana en este día especial. Si quiere averiguar más sobre esta festividad en Girona, por favor contacte nuestro servicio de residentes