Cuando decidimos renovar el Hotel para crear el nuevo Hotel Camiral en 2016, teníamos claro que necesitábamos un diseñador que pudiera asumir el desafío de crear un nuevo espacio sin dejar de lado la esencia local de este lugar. Teníamos la persona ideal para ello. Lázaro Rosa-Violán es uno de los interioristas más prolíficos y con más talento de España. Es reconocido por su capacidad para reconvertir ambientes triviales en espacios maravillosamente peculiares y enormemente confortables donde poder pasar buenos momentos. Actualmente está llevando a cabo proyectos en más de 12 países diferentes. Aun así estamos orgullosos de que, después de un año de haber inaugurado, haya tenido tiempo de hablar con nosotros sobre su proyecto en Hotel Camiral.
Cuál es su definición del espacio?
Un espacio puede ser cualquier cosa, pero la atmósfera que acompaña al proyecto, su carácter y personalidad, son lo que dan vida al espacio y todo esto es lo que constituye el fundamento de cada proyecto que llevo a cabo.
Qué es lo que más te inspira?
Barcelona es una de mis principales fuentes de inspiración, pero viajo mucho, e inevitablemente durante todos estos viajes me encuentro con todo tipo de recursos. También creo que es importante tener tiempo para viajar. Encuentro muchas de mis mejores ideas entre las tendencias de diferentes épocas.
Cuáles eran los principales retos cuando empezaste a concebir el proyecto de Hotel Camiral?
Antes de la renovación el hotel no tenía ningún tipo de personalidad. Todos los espacios tenían la misma estética y no te invitaban a sentarte y disfrutar de ellos. En el exterior pasaba más o menos lo mismo, la piscina era muy pequeña y la terraza estaba parcelada en muchas pequeñas áreas que te hacían sentir atrapado.
Mi principal objetivo fue encontrar su esencia, y dar en cada espacio una personalidad única. Conseguir crear diferentes ambientes que estén visualmente siempre conectados, que cuando estés en un sitio puedas contemplar que hay más allá. Conectamos el interior con el exterior invadiendo los lobbies y las habitaciones con luz y naturaleza. Esto te invita a explorar, divertirte, relajarte, tanto dentro como fuera.
Cuáles son los elementos básicos del interiorismo?
En el centro del edificio tiene 3 alturas diferentes. En el lobby superior encontramos una pared hasta el techo llena de puertas y cajones creando una atmósfera íntima, pero también nos da unas vistas espectaculares a las 3 diferentes áreas. En el lobby inferior tenemos una librería con una chimenea central que nos ofrece un espacio tranquilo, un sitio donde pasar un buen rato. Me encanta usar espejos grandes que reflejan en todo momento lo que está sucediendo en las otras áreas, de esta forma siempre eres partícipe de todo, y a la vez tienes la sensación de transparencia y aire. Cada área está diseñada con lámparas de grandes dimensiones, que ofrecen a los renovados techos una vivacidad que antes no tenían.
Cómo se refleja la cultura catalana en Hotel Camiral?
Hemos sido muy cuidadosos en el uso de fibras naturales locales, madera, motivos vegetales pintados a mano en las baldosas de cerámica de las paredes y pavimentos, telas, dibujos y elementos de atrezzo. Podemos coger la escalera central como ejemplo, donde las ánforas de la zona en vitrinas de cristal conectan el lobby y el bar, o los mosaicos de cerámica con motivos florales de los baños que están basados en los dibujos de flores de la región.
Luz y color son una de las características más destacadas de esta región. Como las has incorporado aquí?
La luz siempre juega un papel fundamental en nuestros proyectos. Hemos usado una luz más general durante el día para realzar la luz natural que tenemos en todo el espacio, mientras que la luz más discreta y focalizada es usada durante la noche en forma de lámparas colgantes y tiras de leds escondidas en los techos y armarios. Utilizamos luz cálida, blancos rotos en nuestros lienzos donde los materiales naturales se combinan con azules y verdes mediterráneos, y los tonos arcilla de los viñedos y las colinas onduladas del paisaje de alrededor. Supongo que es la clave de todo: siempre conectando interior con exterior y viceversa.